jueves, 25 de diciembre de 2014

Cash Luna y sujeto dicen que Maria tenía una cantina y Jesús vendía tragos


Ya no saben que argumento esgrimir para pedir dinero, y la gente sigue detrás de los impostores y estafadores que se atreven a burlarse de Dios. Tanta basura vomitada por los que se hacen llamar "ungidos" "profetas" "apóstoles" para un robo descarado a gente ignorante y con falta de fe en la Biblia, Si usted lee la Biblia, Dios mismo le esta predicando, HERMANOS LEAN LA BIBLIA Y SIGAN A CRISTO.

(Una de las razones de la pobreza de nuestro pueblo es porque no le dan importancia a la lectura en general, esto se debe a que un porcentaje alto de los bolivianos tenemos sangre indígena y la cultura Aymara y Quechua no tenían escritura es decir no sabían leer ni escribir, tanto la lengua Quechua, Aymará, Guaraní no tienen alfabeto. Pero nunca es tarde es hora de comenzar el hábito de la lectura hermanos, lean, lean, lean.Hay "grandes" licenciados, doctores, ingenieros que leyeron lo mas estrictamente necesario para aprobar su carrera en la Universidad, a partir de ahí no leen nada mas y son relativamente ignorantes casi igual a los campesinos del área rural. Tenemos que cambiar, es tal la falta de conocimiento, que los catedráticos de la Universidad San Francisco Xavier de Chuquisaca se creen lo máximo, cuando en realidad esta universidad es totalmente desconocida en el mundo científico, y tanto los rectores como los catedráticos son parte de una mafia burocrática de ignorantes, que ganan fabulosos sueldos sin merecerlo. Es lo mismo sea Barrón o Arízaga como rector,.ambos tienen la misma mentalidad, aprovecharse del dinero de la Universidad para su propio beneficio, son seguidores de Sancho Panza).

El evangelio que se adapta al pecado o Transcultural

Por autor Anonimo:
Escuchó alguna vez acerca del... "evangelio transcultural?" Cuando uno comienza a averiguar esto, en un primer momento parece algo plausible, incluso necesario. Uno se fija la idea que lo que pretenden, es tratar de comprender a la gente del lugar donde uno quiere presentar el evangelio.
En otras palabras, si usted va a Brasil y la cultura allí festeja su carnaval, usted debe adecuar el evangelio al carnaval, de modo que los brasileños no rechacen el evangelio. Es lo mismo que decirles que ellos pueden seguir participando en las orgías carnavalezcas y al mismo tiempo pretender que son cristianos. Siempre uno puede hallar algún... "texto bíblico para apoyar la idea".
Lo mismo ocurriría con la música. Si usted ha de ser discípulo de uno de estos conceptos del transculturalismo, olvídese del concepto de la música cristiana que presenta Pablo cuando dice: "... con salmos e himnos y cánticos espirituales" (Col. 3:16b). Hoy en día muchos cristianos dirán que esta música paulina es "para los viejitos" no para la generación joven y artísticamente tan avanzada.
¿Cuál era el evangelio que Pablo predicaba al recorrer Asia y luego Europa? ¿Trataba de averiguar la cultura de cada pueblo para acomodar el evangelio a esas culturas respectivamente? No, usted no verá tal cosa, Pablo predicaba a Cristo y nada más. Él escribió a los hermanos en Corinto: "Porque los judíos piden señales, y los griegos buscan sabiduría; pero nosotros predicamos a Cristo crucificado, para los judíos ciertamente tropezadero, y para los gentiles locura; mas para los llamados, así judíos como griegos, Cristo poder de Dios, y sabiduría de Dios" (1 Co. 1:22-24). Un poco más adelante dice: "Pues me propuse no saber entre vosotros cosa alguna sino a Jesucristo, y a éste crucificado" (1. Co. 2:2).
Hoy por hoy los colombianos piden cumbia, los del Caribe salsa, los brasileños macumbas, los carismáticos milagros, los pentecostales lenguas, los de Shuler y muchos otros buscan autoestima, visualización y prosperidad material lo mismo que el poder de la palabra.
Estos... gustos tan variados irán en aumento, pero el deber del auténtico cristiano es exigir que el pecador se ajuste a la doctrina de Cristo, abandonando sus gustos y creencias. No importa la cultura, el evangelio es el mismo para Asia, África, Europa, América, etc. Todos los pecadores padecen del mismo mal: el pecado, por lo tanto, todos necesitan el mismo auxilio: el divino. Necesitan saber del mismo Cristo que fue crucificado por ellos para redimirlos y salvarlos. No existen diferentes medios de salvación para los respectivos grupos étnicos con sus diferentes culturas.
La idea del "evangelio transcultural" se está haciendo muy popular, pero nosotros debemos cuidarnos de este truco satánico. En la Biblia leemos: "Mas si aun nosotros, o un ángel del cielo, os anunciare otro evangelio diferente del que os hemos anunciado, sea anatema. Como antes hemos dicho, también ahora lo repito: Si alguno os predica diferente evangelio del que habéis recibido, sea anatema" (Gá. 1:8,9). Pablo no tenía un evangelio para los judíos y otro para los griegos, luego otro para los asiáticos y otro para los romanos. Las culturas eran muy diferentes, pero el evangelio diseñado por el Espíritu Santo es tal que tiene el mismo efecto en todos y cada uno de los diferentes pueblos del globo.
Quienes predican este falso evangelio transcultural sostienen que en un país donde impera la idolatría, no se debe hablar abiertamente en contra de la idolatría. Dicen que en un país, como Alemania por ejemplo, donde beber bastante cerveza es parte de la cultura, o en España, donde abunda el buen vino, no se debe hablar contra estas bebidas ni contra el pecado de la embriaguez porque eso no es pecado para esos pueblos, pero sí lo es donde no se bebe tanto.
Si los misioneros que llevaron el evangelio a tantos pueblos de la tierra en el pasado hubieran seguido este patrón, en muchos de esos países no habría cristianos hoy. El que lleva las buenas nuevas debe ser bien claro en esto. El mismo evangelio que predicó el Señor, lo predicó Pedro a los judíos en Jerusalén el día de Pentecostés. Luego Felipe lo predicó en Samaria, también Pedro en la casa de Cornelio. Pablo hizo exactamente lo mismo cuando predicó a los griegos y a los romanos. Lo único que cambiaba era el idioma, pero ellos siempre denunciaron exigiendo que los paganos abandonaran su paganismo y se volvieran al Dios verdadero, aunque el politeísmo era la cultura de esos pueblos.
¡Cuán rápidamente ha pasado el tiempo! Nos encontramos ya en el año 2003. Con el temor al Y2K, el que finalmente resultó un fiasco, la tecnología moderna ha creado un nuevo mundo electrónico sin fronteras. Podemos ver ya a la vuelta de la esquina el gobierno del Anticristo. Las corporaciones multinacionales han unido a este mundo en una forma que era imposible anticipar hace sólo unas décadas. ¡No hay forma de regresar! Durante años Profecías Bíblicas ha estado anticipando este escenario.
Los billones de dólares gastados para prevenir las fallas en el sistema computarizado mundial puso el fundamento para una nueva explosión tecnológica más allá de la imaginación. No sorprende que los líderes cristianos hayan también sucumbido víctimas de la euforia al considerar la creciente apostasía. "A fin de cuentas", dicen algunos, "con la alta tecnología: ¿quién necesita el Espíritu Santo? ¿Quién le teme a Dios? ¡El hombre ahora lo controla todo!"
Por años hemos estado dando advertencias respecto al aumento acelerado del ecumenismo. Ya que el Señor no vino por su iglesia en el año 2000, como muchos esperaban, cada vez somos menos los que creemos en el rapto. Uno puede ver a la iglesia mundial, la del Anticristo, elevándose como el ave fénix desde las cenizas del cristianismo profesante. Es bien fácil poder trazar esta progresión. Además de esto, advertimos un nuevo fenómeno entre el cristianismo. Como hoy se está predicando el evangelio en diferentes países del mundo, se está popularizando cada vez más el concepto de un evangelio que se ajuste a cada cultura, en otras palabras, un "evangelio transcultural".
El apóstol Pablo se sorprendió cuando la primera generación de cristianos comenzó a morir. Hoy, ha concluido el segundo milenio de la historia de la iglesia y estamos ya en el tercero. No sería raro que los santos que dan testimonio en gloria, estén diciéndose unos a otros:"¿Quién lo hubiera pensado, que la Iglesia haya entrado en su tercer milenio de existencia?" Pero así es la forma cómo opera la providencia de Dios. ¿Qué nos depara este tercer milenio en esa porción de tiempo que queda hasta que vuelva el Señor? Lamentablemente, hay tendencias peligrosas que son bien alarmantes.
Lo primero que advertimos es una pasión desbordante por la unidad. El tema del ecumenismo que prevalece en forma asombrosa en este siglo es: "¡El evangelio será más poderoso y los ideales bíblicos más penetrantes, si dejamos a un lado las distinciones doctrinales y reunimos a todos los que pronuncian el nombre de Cristo en un gran coro de testimonio al mundo!"
Mientras que muchos creyentes hoy desean ardientemente la unidad, las generaciones anteriores de pensadores cristianos preferían seguir la precisión doctrinal. Martín Lutero, por ejemplo, hacía una distinción firme entre la justicia impartida, que denunciaba como herética, y la justicia imputada. Esta justicia impartida es supuestamente provista por Cristo, pero sólo se obtiene a través de los sacramentos administrados por la iglesia católica romana. Pablo, sin embargo habló en su epístola a los romanos de una justicia imputada, la misma justicia de Cristo aplicada divinamente al pecador en el instante de su conversión. Esta justicia imputada es la que permite que el pecador, desde el momento en que es salvo en adelante, permanezca legalmente impecable ante el Dios santo y justo. "Porque ignorando la justicia de Dios, y procurando establecer la suya propia, no se han sujetado a la justicia de Dios; porque el fin de la ley es Cristo, para justicia a todo aquel que cree. Porque de la justicia que es por la ley Moisés escribe así: El hombre que haga estas cosas, vivirá por ellas. Pero la justicia que es por la fe dice así: No digas en tu corazón: ¿Quién subirá al cielo? (esto es, para traer abajo a Cristo); o, ¿quién descenderá al abismo? (esto es, para hacer subir a Cristo de entre los muertos). Mas ¿qué dice? Cerca de ti está la palabra, en tu boca y en tu corazón. Esta es la palabra de fe que predicamos: que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo. Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación" (Ro. 10:3-10).
Este tipo de precisión teológica deliberada fue la esencia del pensamiento de la reforma. Sin embargo, muchos hoy cuestionan la legitimidad de hacer esta clase de distinciones. De hecho, no ha surgido ningún concepto más pernicioso que el que dice que la causa de Cristo se ve mutilada cuando los hombres son demasiado apasionados acerca de la verdad de la Palabra de Dios y que la verdad revelada nunca debe ser un impedimento para la unidad.
Es cierto que muchos han predicado frecuentemente un separatismo basado en normas inventadas por ellos mismos, pero este celo mal enfocado no minimiza la obligación del creyente: "Compra la verdad, y no la vendas..." (Pr. 23:23). No es bíblico descuidar la verdad a cambio de una unidad superficial con aquellos que abrazan una doctrina diferente. Así como no hay ninguna excusa para arriesgar la unidad a menos que se justifique por las claras normas y verdades de la Palabra de Dios, tampoco hay justificación para insistir en la supuesta unidad a expensas de lo que enseñan claramente las Escrituras.
El ataque de Satanás no había sido nunca antes más certero, que ahora cuando lo está usando para separar a los creyentes de su confianza en la autoridad y la suficiencia de las Escrituras. El diablo y sus huestes demoníacas evidentemente están trabajando horas extras para convencer a los cristianos de que sólo se puede dar testimonio de labios respecto a la autoridad de la Palabra de Dios, pero que ninguna persona moderna y racional puede vivir de acuerdo con ella. Es por eso que los líderes "cristianos" hoy, están bien ocupados, especialmente porque es un tiempo en el que se están uniendo a la iglesia, personas con trasfondos culturales muy diferentes entre sí, a las cuales, según ellos, "sería absurdo tratar de cambiar en forma tan radical".
Si bien hay muchas estrategias diabólicas que están trabajando con ese objetivo, el precursor del mayor mal parece ser el concepto de que la Biblia sólo significa lo que uno piensa que significa. Por lo tanto, el cristiano debe entresacar lo que parece ser el significado de la Palabra escrita y luego reconstruir el mensaje según su propio programa. Estos nuevos maestros en teología argumentan, que como esas personas de diferente trasfondo cultural traen su propio marco de referencia, sus anhelos y sus costumbres, sólo ellos deben determinar el significado del mensaje, y que no se le debe imponer la Palabra escrita al pie de la letra.
En consecuencia, ningún mensaje puede significar algo en forma cierta. La comunicación objetiva es imposible, la verdad objetiva, imaginaria. Por lo tanto, la Biblia está terminando por convertirse en una degeneración de lo que cada individuo le gustaría que fuera. ¡Evidentemente los distribuidores de esta filosofía creen que no se aplica a ellos porque están afirmando que es imposible explicar algo! El significado de las Escrituras es determinado, independientemente de si lo entienden totalmente o no. Pero Dios sí sabe cómo decir lo que significa y sabe qué es lo que dice.
Toda persona que manipule el mensaje de la Biblia según su gusto particular, en vez de aceptar lo que ha hablado el Dios soberano, tendrá que responder ante el Señor. Es por esta razón que un buen estudiante de la Biblia ora y le pide al Espíritu que lo iluminey le ayude a pensar con los pensamientos de Dios, antes que los propios. Trabaja para entender la cultura desde la cual surgió el mensaje de las Escrituras y los idiomas en que se escribió la Biblia originalmente. Lucha por estudiar la Biblia como un todo, para que la propia Escritura pueda corregirlo cuando su comprensión de un pasaje dado sea incorrecta.
Esta nueva forma de pensamiento ha invadido el mundo cristiano, sugiere la idea de que un pasaje de la Escritura puede tener más de un significado, uno para usted y otro completamente diferente para mí, uno para una cultura y otro para otra, un significado para una generación anterior y otro para una generación posterior."Después de todo", dicen estos nuevos teólogos, "cada creyente debe determinar su significado". No, no es así. Esta teoría está llena de errores. Por cierto, hay algo de verdad en la frase trillada de que, "un significado puede tener varias aplicaciones", pero cada aplicación debe surgir legítimamente del significado fijo del pasaje. Lo primero que debemos preguntarnos es: ¿Qué quiso decir el autor original cuando, por inspiración del Espíritu de Dios, le escribió a la iglesia primitiva? ¿Por qué usó esas palabras específicas y esas construcciones gramaticales? De esto trata la interpretación gramatical e histórica. Aplicar estos principios protegerá al cristiano de infundirle a un texto el significado que más le guste. Si los creyentes fracasan en sujetarse firmemente a este principio básico de la interpretación bíblica, serán engañados fácilmente.
Hoy advertimos una indiferencia desmedida hacia el Antiguo Testamento. Algunos prácticamente lo han extirpado de la Biblia. Demasiados cristianos parecen satisfechos con encuadrar sus vidas sólo alrededor del Nuevo Testamento y pasan muy poco tiempo, o ninguno, estudiando los otros 39 libros de la Biblia. Esta es una indiferencia peligrosa. El Señor Jesucristo enfatizó el valor eterno de toda la Palabra de Dios, así como la responsabilidad del creyente de conocerla y obedecerla. Dijo: "No penséis que he venido para abrogar la ley o los profetas; no he venido para abrogar, sino para cumplir. Porque de cierto os digo que hasta que pasen el cielo y la tierra, ni una jota ni una tilde pasará de la ley, hasta que todo se haya cumplido" (Mt. 5:17,18).
Asimismo dijo Dios por medio de Pablo:
• "Porque las cosas que se escribieron antes, para nuestra enseñanza se escribieron, a fin de que por la paciencia y la consolación de las Escrituras, tengamos esperanza" (Ro. 15:4).
• "Y estas cosas les acontecieron como ejemplo, y están escritas para amonestarnos a nosotros, a quienes han alcanzado los fines de los siglos" (1 Co. 10:11).
• Pero persiste tú en lo que has aprendido y te persuadiste, sabiendo de quién has aprendido; y que desde la niñez has sabido las Sagradas Escrituras, las cuales te pueden hacer sabio para la salvación por la fe que es en Cristo Jesús. Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra" (2 Ti. 3:14-17).
Por ejemplo, Dios le dio a Daniel algunas visiones y sueños que anticipaban el futuro, la nación que gobernaría inmediatamente después de Babilonia, al igual que los reinos sucesivos hasta el estado eterno y el reino de nuestro Señor. Jehová le hizo saber con anticipación la venida de los reinos futuros, los conflictos de los reyes futuros y la completación de todas las cosas. Descubrimos en las profecías de Daniel, al igual que en el libro de Apocalipsis, que en los últimos días se integrará una confederación de 10 bloques de naciones que son parte integral del antiguo imperio romano. Por eso es que los estudiosos de la profecía le llaman a la Unión Europea, el Imperio Romano revivido. Esto se ajusta a las profecías del libro de Daniel. Todavía no hemos visto todo, pero sí lo suficiente para saber que estas profecías señalan al pronto retorno de Jesús. El libro de Daniel junto con el de Zacarías, contienen profecías maravillosas.
Walter Kaiser, en la página 17 de su libro publicado en inglés Hacia un redescubrimiento del Antiguo Testamento, identifica al Antiguo Testamento como «el problema más central y decisivo de la teología cristiana». Argumenta «que la actitud que adoptamos ante el Antiguo Testamento, determinará automáticamente gran parte de nuestra teología cristiana, sea que lo hagamos en forma deliberada o en forma irreflexiva». Pero muchos cristianos hoy muestran una indiferencia negligente hacia el Antiguo Testamento y no ven problemas en arrojar a un lado esa parte tan vital de la revelación sagrada. Tal vez el mayor peligro de esta actitud de descuido, es que el creyente que disfruta de las bendiciones provistas por el Nuevo Pacto puede perder de vista la majestad del Dios que se reveló en forma tan poderosa en el Antiguo Testamento. Por cierto, la principal característica del Nuevo Pacto es el Espíritu Santo que mora dentro de nosotros, ministrando al creyente en una intimidad con Dios que era inconcebible en el Antiguo Testamento.
Hoy tenemos el privilegio de poder llamar a Dios "Abba", una palabra hebrea que significa "Padre", como dice la Escritura: "Pues no habéis recibido el espíritu de esclavitud para estar otra vez en temor, sino que habéis recibido el espíritu de adopción, por el cual clamamos: ¡Abba, Padre!" (Ro. 8:15) "Y por cuanto sois hijos, Dios envió a vuestros corazones el Espíritu de su Hijo, el cual clama: ¡Abba, Padre!" (Gá. 4:6) Sin embargo, hay un pecado en el que puede caer todo el que disfruta de esta intimidad: la familiaridad descuidada. Esta familiaridad se manifiesta de distintas formas hoy: en la petulancia, la superficialidad y el respeto marginal con que los creyentes hablan del Dios eterno. En la forma tan descuidada como consideran sus mandamientos y normas, y en el carácter egocéntrico de la adoración. Esto mejoraría si simplemente se le prestara una mayor atención al Antiguo Testamento. Creo que no hay mejor antídoto para esta actitud que sobrecogernos con temor reverente al leer de la visión del profeta Isaías al contemplar el trono del Dios tres veces santo. En unir nuestras voces con la del salmista de Israel mientras alababa al Señor que hizo el cielo, y al maravillarnos ante el relato de los hechos poderosos de Jehová y el descuido de su pueblo.
Sin el Antiguo Testamento, es también imposible entender correctamente el lugar único que ocupa el pueblo escogido de Dios en la historia mundial y las raíces judías del cristianismo. Es muy peligrosa la actitud de la nueva comunidad cristiana que acepta tan a la ligera la gracia ofrecida en el Nuevo Testamento mientras descuida la base firme del Antiguo Testamento. Este desprecio deliberado por las verdades escatológicas que contiene la Biblia, parece haberse convertido en la moda de la época. "Ciertamente", dicen: "al final todo saldrá bien según la intención de Dios", pero ese hecho no absuelve a los creyentes de su obligación de estudiar y creer en las Escrituras proféticas que describen cómo saldrá todo bien. Aproximadamente una cuarta parte de la Biblia es profecía, y la Escritura nos amonesta a que estemos siempre alertas:
• "Velad, pues, porque no sabéis a qué hora ha de venir vuestro Señor. Pero sabed esto, que si el padre de familia supiese a qué hora el ladrón habría de venir, velaría, y no dejaría minar su casa" (Mt. 24:42,43).
• "Velad, pues, porque no sabéis el día ni la hora en que el Hijo del Hombre ha de venir" (Mt. 25:13).
• "Mirad, velad y orad; porque no sabéis cuándo será el tiempo. Es como el hombre que yéndose lejos, dejó su casa, y dio autoridad a sus siervos, y a cada uno su obra, y al portero mandó que velase. Velad, pues, porque no sabéis cuándo vendrá el señor de la casa; si al anochecer, o a la medianoche, o al canto del gallo, o a la mañana; para que cuando venga de repente, no os halle durmiendo. Y lo que a vosotros digo, a todos lo digo: Velad" (Mr. 13:33-37).
Asimismo le confiere una bendición especial a todos los que estudian cuidadosamente el Apocalipsis, la porción que revela en forma más completa la gran culminación que Dios ha planeado para la historia:
• "Bienaventurado el que lee, y los que oyen las palabras de esta profecía, y guardan las cosas en ella escritas; porque el tiempo está cerca" (Ap. 1:3).
• "¡He aquí, vengo pronto! Bienaventurado el que guarda las palabras de la profecía de este libro" (Ap. 22:7).
Es obvio que toda especulación sobre los últimos tiempos que no puede ser respaldada por las Escrituras es molesta en el mejor de los casos, y peligrosa, en el peor de ellos. Pero el remedio para el abuso de la interpretación de la profecía no es abandonarla, sino honrar diligentemente los principios de la interpretación sólida gramatical e histórica. Sólo Dios sabe el curso que tomará la historia de la iglesia durante este próximo milenio. Pero si continúan estos acontecimientos, es lógico suponer que las distinciones doctrinales continuarán desintegrándose en favor de una unidad cada vez menos bíblica.
Esto puede no ser un buen augurio para los cristianos que no estamos dispuestos a ceder y abandonar nuestras creencias 100% bíblicas. Podríamos convertirnos en el problema que requiere una solución. Las repercusiones, sin embargo llegan aún más lejos. Una vez que los hombres se deshagan del verdadero significado de la Palabra de Dios, podrán justificar cualquier cosa. Sin la confianza en la suficiencia de las Escrituras y sin el fundamento del Antiguo Testamento, se volverá más fácil aún para los cristianos, creer una mentira.
¿Cómo pueden líderes que deberían saberlo mejor, pervertir en forma tan descarada el evangelio de Dios, promoviendo esperanzas falsas y desviando a millones a que confíen en sus propias palabras? ¿O será que en su afán por presentar grandes cifras de "convertidos" están dispuesto a sacrificar no sólo la sana doctrina, sino hasta su propia alma? ¿Será acaso que temen más al rechazo de los hombres que al de Dios? ¿En dónde está el temor a Dios? ¡Están haciendo mofa del Dios de los cielos!
La perversión de la verdad trae popularidad. ¡Qué Dios nos libre de caer en una trampa semejante, en un afán por ganar nuevos convertidos! ¡Nuestro compromiso de estar firmes por su verdad redunda en el bienestar eterno de esos a quienes influenciamos! ¡Ojalá trabajemos para la gloria de Dios, sin buscar la popularidad al ser "un gran evangelista!"

miércoles, 17 de diciembre de 2014

¡MICHAEL ROOD NIEGA EL ARREBATAMIENTO!

(Escrito por otro judío):

Amados hermanos y amigos, hace días atrás mi amigo RAFAEL HERNANDEZ de ATALAYA DE CRSITO, publicó un artículo denunciando las herejías de éste predicador de ORIGEN JUDÍO, llamado Michael Rood.

Desgraciadamente, muchos creen que por ser judío, ÉSTE SEÑOR SÍ, "predica la verdad", y NO es así.

Este PERSONAJE que ahora VOMITA SUS HEREJÍAS en la RED SATANICA ENLCAE TBN, se está dando a la tarea de predicar muchísimas FALSEDADES. Considero que lo grave de sus declaraciones, me obligan a publicar esta nota donde abiertamente, él NIEGA EL ARREBATAMIENTO DE LA IGLESIA.

Ahora entiendo porque la RED ENLACE TBN, lo recibió en su programación...porque al igual que Guillermo Maldonado, Ronny Chavez, Cash Money Luna, Jonás Gonzáles y demás mentirosos, está EN CONTRA DEL ARREBATAMIENTO y para dar credibilidad a sus MENTIRAS, usan a este predicador que si bien es judío, danza y canta al ritmo de susDEMONIACAS ENSEÑANZAS. 

Noten como ENLACE TBN ESTA TRABAJANDO ARDUAMENTE PARA NEGAR EL ARREBATAMIENTO DE LA IGLESIA. 
No escatiman ningún instrumento diabólico para ROBAR EL DINERO DE LOS BOBOS QUE NO LEEN LA BIBLIA, sino que ahora se dan a la tarea de ROBAR LA ESPERANZA DE LA IGLESIA con irse a la CASA DEL PADRE EN LOS CIELOS.

Negar el Arrebatamiento es MATAR LA ESPERANZA DEL PUEBLO DEL SEÑOR QUE ANHELA UNA PATRIA CELESTIAL.

Juan 14:2, 3 Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros también estéis. En la Casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, Yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros.


Filipenses 3:20 Mas nuestra ciudadanía está en los cielos, de donde también esperamos al Salvador, al Señor Jesucristo.

Hebreos 11:8, 10 y 13, 16 Por la fe Abraham, siendo llamado, obedeció para salir al lugar que había de recibir como herencia; y salió sin saber a dónde iba.9 Por la fe habitó como extranjero en la tierra prometida como en tierra ajena, morando en tiendas con Isaac y Jacob, coherederos de la misma promesa;10 porque esperaba la ciudad que tiene fundamentos, cuyo arquitecto y constructor es Dios. Conforme a la fe murieron todos éstos sin haber recibido lo prometido, sino mirándolo de lejos, y creyéndolo, y saludándolo, y confesando que eran extranjeros y peregrinos sobre la tierra.14 Porque los que esto dicen, claramente dan a entender que buscan una patria; 15 pues si hubiesen estado pensando en aquella de donde salieron, ciertamente tenían tiempo de volver. 16 Pero anhelaban una mejor, esto es, celestial; por lo cual Dios no se avergüenza de llamarse Dios de ellos; porque les ha preparado una ciudad.

Insto a ver este video para comprobar sus Herejías Y POR FAVOR DIFUNDAN LIBREMENTE ESTE ARTÍCULO A TODOS PARA PROTEGERLES:

http://www.youtube.com/watch?v=174Rnz09pMs&feature=related

No sólo que sus enseñanzas son un peligro para la Iglesia, sino que los mismos judíos, NO aceptamos sus FILOSOFIAS y ENSEÑANZAS descontextualizadas. Van abiertamente en contra de lo que los mismos Rabinos nos enseñan. NADIE LO ENTIENDE a este LOCO, NI JUDÍOS NI GENTILES....VEAN LO GRAVE DE SUS ERRORES.

Se disfraza de Sacerdote Judío, sabiendo que eso es Abominable para la Nación de Israel, pretende obligar a los gentiles redimidos por la Sangre del Mesías, a celebrar las Fiestas de ISRAEL como condición para la salvación, olvidándose la enseñanza expuesta en el capítulo:

Hechos 15:5 Pero algunos de la secta de los fariseos, que habían creído, se levantaron diciendo: Es necesario circuncidarlos, y mandarles que guarden la ley de Moisés. 6 Y se reunieron los apóstoles y los ancianos para conocer de este asunto. 7 Y después de mucha discusión, Pedro se levantó y les dijo: Varones hermanos, vosotros sabéis cómo ya hace algún tiempo que Dios escogió que los gentiles oyesen por mi boca la palabra del evangelio y creyesen. 8 Y Dios, que conoce los corazones, les dio testimonio, dándoles el Espíritu Santo lo mismo que a nosotros; 9 y ninguna diferencia hizo entre nosotros y ellos, purificando por la fe sus corazones.15:24 Por cuanto hemos oído que algunos que han salido de nosotros, a los cuales NO dimos orden, os han inquietado con palabras, perturbando vuestras almas, mandando circuncidaros y guardar la Ley, 25 nos ha parecido bien, habiendo llegado a un acuerdo, elegir varones y enviarlos a vosotros con nuestros amados Bernabé y Pablo, 26 hombres que han expuesto su vida por el nombre de nuestro Señor Jesucristo. 27 Así que enviamos a Judas y a Silas, los cuales también de palabra os harán saber lo mismo. 28 Porque ha parecido bien al Espíritu Santo, y a nosotros, no imponeros ninguna carga más que estas cosas necesarias: 29 que os abstengáis de lo sacrificado a ídolos, de sangre, de ahogado y de fornicación; de las cuales cosas si os guardareis, bien haréis. Pasadlo bien. 30 Así, pues, los que fueron enviados descendieron a Antioquía, y reuniendo a la congregación, entregaron la carta; 31 habiendo leído la cual, se regocijaron por la consolación. 32 Y Judas y Silas, como ellos también eran profetas, consolaron y confirmaron a los hermanos con abundancia de palabras.

El Nombre del Mesías es YESHUA no YAHSHUA..Este predicador está equivocado y se los demuestro. Lean:

Esdras 2:1 Estos son los hijos de la provincia que subieron del cautiverio, de aquellos que Nabucodonosor rey de Babilonia había llevado cautivos a Babilonia, y que volvieron a Jerusalén y a Judá, cada uno a su ciudad; 2 los cuales vinieron con Zorobabel, YESHÚA.....

Nóten que el Nombre YESHUA ya era conocido y utilizado desde el retorno del pueblo hebreo del destierro en Babilonia y el Nombre significa SALVACIÓN, precisamente eso esperaba el Pueblo despues del Destierro, la llegada del Mesias y la Salvación de Israel la cual trajo el Mesías Hijo de David....NO le crean a éste vendedor de Ilusiones que les hace creer que la voluntad de Dios para sus vidas es creerse judíos...Dios nos manda a NACER DE NUEVO para ser SUS hijos,,,No les mandó a ser judíos sino HIJOS...

Por favor CUIDENSE DE ÉL Y DE LA BASURA DE ENSEÑANZAS QUE SE DIFUNDEN EN ENLACE TBN. Enlace es una CUEVA DE LADRONES Y UN NIDO DE DOCTRINAS FALSAS Y DEMONIACAS PREDICADAS POR HOMBRES Y MUJERES EN SERVICIO DE SATANAS Y QUE HACEN MERCADERÍA DE LA FE.

Como judío, siento vergüenza ajena al escuchar tanta estupidez junta predicada por este loco que se cree "profeta"

La información sobre Michael Rood me sigue llegando y es verdaderamente claro, que este caballero, FUE ECHADO de su denominación por MALVERSACIÓN ECONÓMICA y NO por predicar contra el Arrebatamiento de la Iglesia solamente. Me pasaron este link:

Michael Rood, fundador de "Un Rudo Despertar" es despedido por su Junta Directiva
El Ministerio de Michael Rood se encuentra Clausurado. martes 1 de febrero de 2011

BYRON CENTER, Michigan. (WOOD) - El hombre que comenzó la organización "A Rood Awakening" (Un Rudo Despertar), un ministerio de educación de alcance global, fue despedido por su Junta Directiva y ahora esacusado de Malversación y Evasión de Impuestos -- dejando a la organización bajo la lupa del IRS (La Agencia Federal Estadounidense de Recaudo de Impuestos).
El letrero de la puerta de la oficina del ministerio en Byron Center solía decir "A Rood Awakening for Michael Rood" (Un Rudo Despertar por Michael Rood).  Pero su nombre ha sido removido.
El sitio web del ministerio describe a Rood como "el Matador Mesiánico" que reta a las religiones convencionales con su propia interpretación de las escrituras hebreas.
Después que la Junta Directiva hubo tomado acciónes contra él, Rood supuestamente se presentó a las oficinas con un grupo de desempleados y se tomaron el edificio por unos instantes.  La Orden de un Tribunal le ordenó detener su invasión y la Junta procedió a despedirlo definitivamente.

"Volvimos unos días después -- entramos al edificio y ya no había nada" dijo Ken Klump, un excolega de Rood.  "Las Cámaras no estaban."
El estudio de grabación donde Rood creaba los videos que enviaba por todo el mundo se encuentra vacío junto con los archivos de la organización, dijo Klump.   En un video en su website, Rood acusa a sus antiguos empleados y miembros de la Junta de tratar de adueñarse de su ministerio.
Ahora su organización se encuentra clausurada (cerrada), 15 de sus empleados despedidos y habrá una audiencia el miércoles próximo que ordenará a Rood mantenerse fuera de la propiedad.
Contraviniendo la Orden de la Corte,  Rood todavía sigue con su website al aire, administrándolo desde algún en Carolina del Norte -manifestó una de nuestras fuentes-
24 Hour News 8 ha intentado contactar a Rood, pero no hemos tenido éxito.

Actulización: El 1 de septiembre de 2010, los abogados de Rood llamaron a su Contraparte para ofrecer un arreglo. Ambas partes se encontraron en la Corte de Kent County para negociar.  Michael Rood fue obligado a devolver todos los bienes que había extraído del edificio, Su ministerio fue clausurado (cerrado) y acordaron vender los activos de la extinta organización y dividirlos entre todos.

miércoles, 3 de diciembre de 2014

LA IGLESIA EMERGENTE "DE CVC LA VOZ"

“Estando él sentado en el monte de los Olivos, los discípulos se le acercaron aparte, diciendo: Dinos, ¿cuándo serán estas cosas, y qué señal habrá de tu venida, y del fin del siglo?  4 Respondiendo Jesús, les dijo: Mirad que nadie os engañe. 5Porque vendrán muchos en mi nombre, diciendo: Yo soy el Cristo; y a muchos engañarán… 11 Y muchos falsos profetas se levantarán, y engañarán a muchos; 12 y por haberse multiplicado la maldad, el amor de muchos se enfriará… Porque se levantarán falsos Cristos, y falsos profetas, y harán grandes señales y prodigios, de tal manera que engañarán, si fuere posible, aun a los escogidos” (Mateo 24: 3-5, 11, 12, 24)

Introducción

A lo largo de las últimas décadas ha aparecido una nueva forma de contemplar el ministerio eclesial que pretende incorporar un acercamiento más relevante al mundo de cara a los servicios de las iglesias.
Se ha llamado “El Movimiento de la Iglesia Emergente”, el cual surge a partir de un sentimiento de que en muchas iglesias algo ha ido mal, sobre todo al fallar en atraer a los más jóvenes al Evangelio, la llamada generación postmoderna o del postmodernismo.
Gran parte de la razón del empuje y expansión del movimiento de la iglesia emergente, se debe a la desilusión entre pastores jóvenes evangélicos que perciben el papel pastoral tradicional como demasiado restrictivo y no suficientemente relevante como para llegar a interesar a la cultura postmoderna.
Pero la buena intención no basta. Veremos que las ganas de conseguir crecimiento y expansión en términos eclesiales, deberá ir de acorde con la guía del Espíritu Santo, y no según métodos y fórmulas humanas.

“Iglesia "Mosaico", una de las muchas iglesias emergentes que han surgido en los últimos años en los Estados Unidos de América”

Confundiendo las formas con el fondo

Por otra parte, el problema estriba también en no saber diferenciar lo que es genuino del Evangelio de lo que es sencillamente son formas o tradiciones humanas.
¡Cuando se llega a confundir el cuadro con el marco, a veces se puede llegar a quitar parte del cuadro en beneficio del marco!
El problema y el peligro es quitar de lo esencial para mezclarlo con nuevas formas, formas que quizás no lo son tanto sino que son parte de lo fundamental que se está quitando, pero pervertido, sin sal, sin sustancia, sin el Espíritu Santo, sólo agradable al ojo.
Esa falta de discernimiento es el causante de mucho mal.
Las formas son sólo formas, y cambian con los tiempos y con la mentalidad y la cultura de la gente. Los instrumentos musicales de ahora no son los de hace 100 años, menos todavía los que tocaba David. Eso no es relevante.

Pero el fondo, es decir, lo esencial del Evangelio, eso no debe cambiar porque es de Dios.

El resultado de las falsas enseñanzas y falsas profecías

“Pero el Espíritu dice claramente que en los postreros tiempos algunos apostatarán de la fe, escuchando a espíritus engañadores y a doctrinas de demonios” (1 Tim. 4: 1)
Para muchos pastores y ministros, especialmente jóvenes, y por tanto, con muchas ganas de trabajar para la obra de Dios, es muy difícil encajar la realidad de los tiempos que estamos viviendo; más aún cuando han sido tan influenciados por las enseñanzas triunfalistas (y falsas) del neo pentecostalismo, Latter Rain Movement, Nueva Reforma Apostólica de C. Peter Wagner, G12/D12, etc. etc.
Cuando les dijeron y “profetizaron” que la Iglesia iba a triunfar en este mundo, conquistando las naciones, discipulando las naciones, y viendo a las masas rendirse a Cristo en el más puro estilo postmilenarista (Reino Ahora), con cierta incredulidad están contemplando impávidos todo lo contrario. Aún y así, muchos siguen aferrándose al dicho de los falsos profetas, porque lo que les prometen “de parte del Señor” es muy deseable.

…y la maldad aumentará

Lo cierto es que las gentes están cada vez más alejadas no sólo de Dios, sino de Sus principios y valores, que es lo mismo.
De forma particular, en el occidente, somos testigos de la desintegración de los valores cristianos. Vivimos en el tiempo de la apostasía a todo nivel, cuando el Señor Jesús dijo que la maldad iba a aumentar. Esa maldad hay que entenderla como odio a la voluntad de Dios, la cual implica un Absoluto.
Esto último nos lleva a ver cómo entienden (o quieren entender) muchos la realidad que les rodean.
Después del fracaso del hombre en su autosuficiencia modernista, llegó el tiempo del escapismo, del relativismo, del hedonismo, de la búsqueda de la felicidad por la felicidad, de la negación de absolutos, etc. y a esto los sociólogos le han llamado: el Postmodernismo.
Trataremos en este estudio de todas estas cosas.

Antes veamos acerca de una corriente sociológica que comparte asiento con el anterior y es clave para entender lo que está ocurriendo: El Pluralismo.

1. El Pluralismo

“Pero cualquiera que me oye estas palabras y no las hace, le compararé a un hombre insensato, que edificó su casa sobre la arena; 27 y descendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron vientos, y dieron con ímpetu contra aquella casa; y cayó, y fue grande su ruina” (Mateo 7: 26, 27)
Esta sociedad occidental se mueve en lo que se denominan los valores del Pluralismo.
Podríamos definir el Pluralismo como la ideología del mundo occidental que postula un solo valor absoluto, lo que entienden por: la libertad.
Dicho de otra forma, el pluralismo aboga porque el individuo tenga las menos restricciones posibles, así como las más amplias opciones posibles dentro de la sociedad. Esta ideología vanguardista busca garantizar los derechos personales y las libertades.
En un principio suena aconsejable esa filosofía de vida, pero si profundizamos un poco, nos damos cuenta de que falla por la base. Al no tener un fundamento sólido, el cual sólo podría ser la Palabra de Dios, hace aguas por todas partes. Es como la parábola del hombre insensato, que edificó su casa sobre la arena; y descendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron vientos, y dieron con ímpetu contra aquella casa; y cayó, y fue grande su ruina… ¿Por qué? Porque no tenía su vida edificada sobre la Roca, sino sobre sí mismo.
Y es que el Pluralismo es una filosofía centrada en el “yo”.
El pluralismo encaja perfectamente con el individualismo, el cual en su necia búsqueda de la felicidad se convierte en un agente auto destructivo, y en su falso sentido de la tolerancia, pretende el típico “vive y deja vivir”, que no es más que un postulado hacia el libertinaje.

Pluralismo; su talón de Aquiles: en su punto fuerte está su debilidad
En la misma esencia de tolerancia, canto y oda a la libertad, está en el Pluralismo su debilidad y fracaso.
El Pluralismo aborrece todo aquello que atente contra su particular principio de “libertad”, porque ese sentido de la libertad pluralista, en realidad no es más que un libertinaje encubierto. Es una perversión de la libertad que defiende a capa y espada. Por lo tanto, cualquier planteamiento contrario al Pluralismo es rechazado agresivamente.
Dentro de una actitud pluralista, consecuente con su misma filosofía, el cristianismo debería ser aceptado o al menos respetado, sin embargo, no es así. Nótese que la fe cristiana es una fe de absolutos, que se presenta como la única verdad, por tanto para el Pluralismo es inaceptable.
El pluralista honesto que pretende evitar el rechazar alguna forma de creer o pensar de otros, se ve impotente ante la realidad del Evangelio. De ahí que el Pluralismo a ultranza jamás podrá ser la respuesta a la búsqueda de la verdad, porque la misma verdad, si lo es, es absoluta, y por tanto diametralmente contraria a la filosofía pluralista.
Podríamos decir que el límite del pluralismo es la misma verdad. Pero eso es inaceptable para esa forma humanista y postmodernista de entender las cosas.
El mensaje del Evangelio resulta amenazante para el Pluralismo, de ahí que sus defensores califiquen ofensivamente a los cristianos como de ignorantes, fundamentalistas, fanáticos, moralistas y, sobre todo, homofóbicos.
En el Pluralismo la verdad de cada uno debe respetar la del otro, pero no la Verdad que es la de Dios. ¿La razón? Es obvia, la Verdad de Dios se opone a la “verdad” subjetiva y engañosa del hombre.
En su esencia terriblemente humanista, el Pluralismo no puede tolerar a un Dios por encima del “dios hombre”.
Básicamente en la misma filosofía del Pluralismo se mece el ateísmo del postmodernismo.

2. El Modernismo y el Postmodernismo

En el sentido humanista/pluralista, tenemos lo que los sociólogos llaman el Postmodernismo.
El Postmodernismo representa una apertura a todo tipo de idea y creencia sin el freno de la razón, y menos todavía, de la verdad. Por tanto, es una tolerancia abusadora que rechaza todo tipo de valores absolutos, típico del Pluralismo (donde todos tienen la verdad, y nadie la tiene). Es una huída a ninguna parte.
El Postmodernismo en la actualidad ha logrado asentarse en la sociedad occidental de tal forma que hoy por hoy es la manera de vivir más común entre las nuevas generaciones.
El término postmodernismo significa posterior al Modernismo.
A. El Modernismo
Por Modernismo, nos estamos refiriendo a los valores y principios que existieron en la Edad Moderna, siglos XVI y XVII, la cual se caracterizaba por el seguimiento de los valores absolutos (véase la Reforma Protestante), y su degeneración posterior entrada la Edad Contemporánea.
Se le llama Edad Moderna o edad renacentista, porque vino a ser después del oscurantismo, ignorancia y misticismo de la Edad Media, principalmente dominada e influenciada por el catolicismo romano. De la Edad Moderna, vino la Edad Contemporánea.
La Edad Contemporánea es el nombre con el que se designa el periodo histórico comprendido entre la  Revolución Francesa (1789) y la  actualidad. 
Aunque cambiados – de Dios al hombre - el modernismo contemporáneo (Edad Contemporánea) siguió creyendo en absolutos.
El Modernismo, a raíz de la Revolución Francesa y derivados (La Ilustración), degeneró y cayó en la gran idolatría al elevar a la categoría divina la razón humana. En ese momento, se rechazaron los absolutos cristianos, abrazando el racionalismo y el empirismo como nueva religión: el Humanismo (el hombre por el hombre).
A partir de ese momento, la fe del Modernismo fue una basada en el potencial humano, en el estado moderno, en la ciencia y en la tecnología. Ya no era necesario explicar la creación y el origen de la vida en términos bíblicos porque ahora la ciencia y la razón contestarían los grandes interrogantes del ser humano.
A partir de la “Revolución Industrial” (s. XVIII y XIX), se llegó a la convicción de que la ciencia y la razón lograrían crear un mundo mejor, acabarían con las enfermedades, la miseria, y los grandes problemas del hombre y todos los misterios de la vida serían explicados.
Fue la nueva fe del “hombre por el hombre” (Humanismo).
Lejos de hallar la felicidad y el progreso en lo humano, el Modernismo que exaltaba al hombre por encima de los valores y principios de Dios se fue desmoronando. El fracaso del hombre moderno ocurrido a lo largo del s. XX con las terribles guerras mundiales, el fascismo, el comunismo, etc. se hizo claramente patente a todos.

B. El Postmodernismo
Esta creciente frustración terminó por traducirse en una reacción contraria. Filósofos como Nietzsche, Sartre, Albert Camus, y otros, comenzaron a promulgar las ideas del existencialismo y el nihilismo, filosofías que fueron preparando el camino para el postmodernismo. El concepto de que no hay verdad, porque todo es la verdad y a la vez, nada es la verdad (lo cual es cierto en relación sólo al hombre)
Como escribe el Ps. René Pereira:
“Lo que para el hombre moderno fueron ideales y verdades absolutas, para el postmodernismo son valores relativos y situacionales. Se perdió la fe en las instituciones, en el estado, en los grandes ideales y surgió una nueva fe en el yo, en el individuo. Una mentalidad de sacrificio por el colectivo fue reemplazada por una mentalidad de no-sacrificio por nada. El hombre postmoderno se tornó totalmente indiferente ante la vida. En lugar de luchar por los ideales y los grandes paradigmas, el postmodernismo decidió no pensar en los problemas, no buscar solución sino vivir el momento. El placer y el hedonismo se convirtieron en los dos grandes pilares de la postmodernidad”
El postmodernismo en su rechazo de la objetividad y de la racionalidad, está construido sobre el relativismo, el escapismo, la fantasía, la ilusión, el hedonismo, la comodidad, el “estado del bienestar”, y todo lo que implique la pseudo cultura del ego para el ego.

La penetración social del postmodernismo ha sido efectivamente asombrosa. Se ha generalizado la idea de que todo es relativo. Con que todo es relativo, no existe responsabilidad ni deber algunos hacia nada ni nadie, excepto lo suficiente para uno mismo en cuanto a uno mismo. Es la cultura del egoísmo por antonomasia.
Cada grupo cultural, religioso o político vive, según el postmodernismo, en su propia realidad, siempre acomodada a sí mismo. Es una sociedad “virtualista” hacia lo virtual.
La verdad es totalmente subjetiva, y no hay manera de establecer verdad objetiva y absoluta alguna. De modo que el postmodernismo ha adoptado una actitud de tolerancia, eclecticismo y sincretismo ante toda idea o concepto. En otras palabras, “obtén lo que quieras y desees, si puedes”.
Los educadores postmodernos, por ejemplo, enseñan que cada vez que una persona afirma tener posesión de la verdad (especialmente la verdad religiosa), termina reprimiendo y descartando a todos los que no están de acuerdo.
En el sentido correcto eso es cierto, ya que la Verdad, por su misma esencia, aparta a un lado la mentira. La Biblia así lo enseña:
“La luz en las tinieblas resplandece, y las tinieblas no prevalecieron contra ella” (Juan 1: 5)
¡El problema es que a eso que es bueno, lo llaman malo!
Por ende, el postmodernismo proclama a los cuatro vientos que la verdad ha muerto, no existe. Cada cual fabrica su propia “verdad” según el cristal con que mira las cosas, y nadie puede cuestionar ni poner en tela de juicio la verdad del otro, ya que el individuo es principio y fin de todo. Es el mismo espíritu y filosofía que Satanás le prometió a Eva:
“…serán abiertos vuestros ojos, y seréis como Dios, sabiendo el bien y el mal” (Gn. 3: 5)

3. El Postmodernismo y la Iglesia

“Vosotros sois la sal de la tierra; pero si la sal se desvaneciere, ¿con qué será salada? No sirve más para nada, sino para ser echada fuera y hollada por los hombres” (Mateo 5: 13)
Como era de esperarse, el postmodernismo también ha estado influyendo en la iglesia cristiana. No es desconocido el hecho de que la iglesia no está inmune a las influencias de la sociedad en que interactúa.
El postmodernismo “evangélico” ha producido un nuevo sistema de fe muy semejante a su homólogo secular.

La doctrina por debajo de la experiencia personal
Un sistema en el cual los valores absolutos, la doctrina, las grandes verdades de la Escritura que otrora fueran los pilares del cristianismo verdadero, son abandonados por el culto a la experiencia personal y a la fe individualista.
Es muy peligroso lo que está ocurriendo en los medios neo-pentecostales acerca de lo que se denominan las “experiencias espirituales” de tipo personal. Muchas veces, se hace más caso a las supuestas revelaciones, visiones, sueños y experiencias místicas diversas, que a la Palabra de Dios.
Llegó a mí un e-mail de un líder del G12 de Cali, Colombia, que decía lo siguiente:
“...lo que le pasa  a César Castellanos y a todos los cristianos como nosotros, es que tenemos experiencias espirituales, y son eso, experiencias espirituales personales, es decir no son doctrina…”
Pero las experiencias espirituales, si pretenden ser genuinas de Dios, deberán ir conforme a doctrina.
No obstante, el problema estriba en colocar por encima de la doctrina, las experiencias personales. Esto es influencia postmodernista.
Anteriormente el modernismo contemporáneo, en su afán por lo científico y lo racional, echó a un lado todo lo relacionado con lo espiritual y sobrenatural. El postmodernismo ha hecho todo lo contrario.
Su lema es: hay que creer en algo, no importa lo que sea. El modernismo produjo una iglesia seca que descartó todo lo sobrenatural, un “cristianismo” que terminó negando los milagros, la resurrección de Cristo y el relato de la creación (la “Alta Crítica”)
Surgieron iglesias y seminarios que se volvieron centros de enseñanza humanística. En ellos se negó la inerrancia de las Escrituras y la historicidad de los relatos bíblicos. Las iglesias que abrazaron el modernismo se tornaron liberales y áridas, sin emociones ni experiencias genuinas de Dios.

La fabulista iglesia del postmodernismo
“Porque vendrá tiempo cuando no sufrirán la sana doctrina, sino que teniendo comezón de oír, se amontonarán maestros conforme a sus propias concupiscencias,4 y apartarán de la verdad el oído y se volverán a las fábulas” (2 Timoteo 4: 3, 4)
La iglesia postmoderna representó el extremo opuesto. Una iglesia donde el pensar, analizar, estudiar, y presentar las verdades bíblicas ya no es lo primordial, sino sentir, experimentar, gozar, soñar, conquistar, vivir el momento.
Como escribe el Ps. René X. Pereira en su artículo: “La Iglesia Postmoderna”
“Una espiritualidad que, aunque podría parecer positiva para muchos, es tan peligrosa como el escepticismo modernista porque es una espiritualidad hedonista, fuera de la verdad bíblica. El postmodernismo dio a luz una iglesia diseñada para que las personas vengan a “sentirse bien”, a llenar sus necesidades particulares. Por lo tanto se caracteriza por ser una iglesia cuya predicación es “lite” o liviana, motivacional y sicológica”
La realidad del magisterio de la iglesia del postmodernismo, es la que huye de enseñar sobre temas carnalmente controversiales y ofensivos al oído del hombre postmoderno. Las cuestiones sobre el pecado, la culpa, la ofensa a Dios por ese pecado, el destino final de los que rechazan el Evangelio, es decir, el infierno; incluso temas tan absolutamente de acorde a las Buenas Nuevas, como son la Cruz, la santidad, el arrepentimiento, quedan postergados al olvido. No son populares.
No obstante la temática de la iglesia del postmodernismo siempre será agradable al oído de sus seguidores, y conforme a su búsqueda. De ahí el énfasis abusivo en cuanto a cuestiones como la unción, el poder, las bendiciones, los milagros, la prosperidad material, la realización de los sueños (deseos personales), y hasta se permiten el lujo de adentrarse definitivamente en lo esotérico y metafísico, enseñando sobre la “visualización”, “confesión positiva”, “pensamiento positivo”, etc. etc.
Los postmodernistas creen que están inventando un nuevo modelo filosófico, pero no hay nada nuevo bajo el sol. Escribe John Piper:
“Es irónico y triste que hoy supuestamente los escritores cristianos avant-garde puedan dar esta pose cool, evasiva, imprecisa, artística, superficial de Erasmus y llamarla “postmoderna” y capturar a una generación de gente históricamente ingenua, emergente que no saben que están siendo engañados con las mismas viejas tácticas usadas por los humanistas elitistas de generaciones pasadas. Lo vimos con Atanasio, los Arrianos en Nicea, y los vimos en el tiempo de William Tyndale. No es post-modernismo. Es pre-modernismo – porque es perpetuo.”
Es el engaño de siempre, porque nada nuevo hay bajo el sol.

La iglesia postmoderna VS la Iglesia verdadera
“Porque a vosotros os es concedido a causa de Cristo, no sólo que creáis en él, sino también que padezcáis por él, 30teniendo el mismo conflicto que habéis visto en mí, y ahora oís que hay en mí” (Filipenses 1: 29, 30)
El entendimiento de una Iglesia dispuesta a padecer por Cristo, ha quedado a distancia considerable de la realidad de la iglesia postmoderna. Aún se tiene por maldición a aquel que sufre por causa de Cristo. En cambio, se eleva como bendición todo aquello que signifique el bienestar egoísta del creyente. Per se, cuanto más rico y próspero sea el creyente, más bendecido es.
Como escribe el Ps. René X. Pereira:
“Surge entonces una iglesia diseñada para ser apetecible a las personas, empleando cualquier medio disponible para experimentar un crecimiento rápido. Un tipo de iglesia que mira para el individuo en vez de mirar a Dios, que pone su mira en las cosas de esta vida en vez de ponerlas en lo Alto (Col. 3: 3)”
El cristiano postmoderno está más preocupado por sus asuntos particulares, su felicidad y bienestar personales, o su condición económica que por cualquier otra cosa ajena a él. Ese cristiano ya hace tiempo que ha dejado de ser sal y luz en la tierra.
Seguiremos en un próximo capítulo.
Dios les bendiga.

© Miguel Rosell Carrillo, pastor de Centro Rey, Madrid, España.
Mayo 2010


PARTE 2

“Todas las cosas son fatigosas más de lo que el hombre puede expresar; nunca se sacia el ojo de ver, ni el oído de oír.  9¿Qué es lo que fue? Lo mismo que será. ¿Qué es lo que ha sido hecho? Lo mismo que se hará; y nada hay nuevo debajo del sol.  10 ¿Hay algo de que se puede decir: He aquí esto es nuevo? Ya fue en los siglos que nos han precedido.11 No hay memoria de lo que precedió, ni tampoco de lo que sucederá habrá memoria en los que serán después” (Eclesiastés 1: 8-11)

Dentro de ese maremagnum espiritual emergente, podemos encontrar en gran medida lo relacionado con el llamado Movimiento de la Iglesia Emergente.
Escribe el Ps. Steven W. Cornell en su artículo: “The Emergent Church- A new wave of evangelical identity"
Una posibilidad más preocupante es que los líderes emergentes no estén realmente interesados en la crítica reflexiva bíblica de la postmodernidad. ¿Está la empresa emergente por la labor de buscar una mejor comprensión de la transición a la postmodernidad preparándolo como un reto para la comunicación del Evangelio? ¿O más bien, los líderes emergentes han abrazado los valores de la postmodernidad, porque realmente los consideran superiores?

El valor más importante de la postmodernidad es la inadmisibilidad de todas las formas de totalización de ver cualquier dimensión de la vida. La postmodernidad, como una teoría, se niega a permitir la definición de una única fuente de la verdad y la realidad más allá del individuo. El evangelio entra  en clara contradicción con este valor.
Si el Evangelio es rehén de las restricciones de la posmodernidad, deja de ser una buena noticia.
Como decimos, de unos años a esta parte, de ese caldo de cultivo pluralista y postmodernista surge el llamado Movimiento Emergente Eclesial, también conocido como Movimiento de la Iglesia Emergente, o Iglesia Emergente a secas. Es un movimiento fragmentado, con mucha variedad por lo cual encontrar el definirlo, no es fácil.
Brian McLaren, uno de sus líderes declaró a Christianity Today: 
“Por el momento es una conversación, no un movimiento. Nosotros no tenemos un programa. No tenemos un modelo. Pienso que debemos comenzar como una conversación, luego crecer como una amistad, y ver si resulta en un movimiento.”
Pero a diferencia de lo que dice McLaren, no es una conversación en este momento, sino un movimiento, debido a la gran cantidad de adherentes, sitios en Internet, iglesias, etc.

Un poco de historia

Este movimiento tuvo sus inicios a mediados de la década de los 90. Nombres como Mark Driscoll, Doug Pagitt, Donald Miller, Karen Ward, Don Johnson, Brian McLaren, Tony Jones, suenan a la hora de contemplar este movimiento.
Ya a finales de la década de los 90, Brian McLaren se unió al grupo y fue ahí cuando se inició un cambio drástico, pues empezó a desarrollarse un profundo cambio en lo teológico en la dirección contraria al sentido de las Escrituras.
En ese momento, Mark Driscoll se separa del movimiento pues según declara, la conversación pasó de querer cambiar la forma de llevar el evangelio, a cambiar totalmente el evangelio para poder contextualizarlo a la cultura.
Ese “acondicionar” el Evangelio a la gente impía, para así buscar el atraerles a (ese evangelio adulterado), produjo sus consecuencias.
Driscoll aseguró que su decisión de salir del grupo se debió a que McLaren y Pagitt querían cambiar la teología hasta puntos insostenibles. Driscoll dice acerca de este grupo,
“refiriéndose a Dios como mujer, cuestionando la soberanía de Dios, negando la doctrina de la expiación de Cristo en la cruz, y negando el infierno” (http://sujetosalaroca.org/)
Por lo que podemos ver, este movimiento emergente no es monolítico, sino que tiende en diferentes direcciones. En este estudio nos estaremos centrando en más en las ramas extremas y alejadas de la ortodoxia cristiana.

1. Clasificando lo Emergente

“…siempre están aprendiendo, y nunca pueden llegar al conocimiento de la verdad” (2 Timoteo 3: 7)
No todo lo que se denomina “emergent” (o “emerging”, en este caso) es malo de por sí. Veremos que hay posicionamientos que buscan una manera diferente de hacer las cosas, pero no necesariamente buscando el deshacer (o deconstruir) lo esencial de lo evangélico. Siempre deberemos discernir bien.
Darrin Patrick, es el pastor principal de la iglesia  The Journey in Saint Louis, Missouri. El ha realizado el intento de clasificar en tres ramas el movimiento emergente de la siguiente manera:
A. Emergente ConversacionalSu enfoque se concreta en la revisión teológica, basando su interés en supuesta misiología. Su deseo es cambiar la teología evangélica y reconstruirla. Se encuentran en la izquierda teológica. Ahí se encuentran hombres como Brian McLaren, Scott McKnight, Nancy Murphy, Doug Pagitt, Tim Keel, Karen Ward, Rob Bell, etc. Muchos teólogos han dicho, leyendo el libro de Brian McLaren “Everything Must Change”, que se ha salido de una vez por todas de lo evangélico con su nueva y corrupta teología.

B. Emergente Atraccional:  Son los defensores de la teología reformada. Podríamos decir que están en la derecha teológica. Dentro de estos se encuentran hombres como Mark Driscoll, John Piper, Tim Keller, Matt Chandler, Wayne Grudem, Daniel Montgomery, quienes siguen las ideas de Calvino, Lutero, Zwingly, y el resto de los reformistas(Christianity Today. September 2006.)
C. Emergente Encarnacional: Se enfocan en cambiar la estructura de la iglesia, abogando por las iglesias que se congregan en los hogares. No desean tener grandes iglesias, a diferencia de los emergentes atraccionales. Teológicamente se encuentran en el centro. Se encuentran hombres como Bob Hyatt y Jonathan S. Campbell.
Otra clasificación:
Quizás la siguiente clasificación es más clara. Es la que aporta Ed Stetzer, Director de Lifeway Research y Lifeway's Missiologist in Residence.
Stetzer divide el movimiento en tres categorías: los relevantes; los reconstruccionistas; y los revisionistas.
a) Relevantes:
Son los que toman el mismo evangelio en su forma histórica pero buscan hacerlo comprensible a la cultura postmoderna. Utilizan diferentes métodos de alabanza, predicación, estructura, etc.
b) Reconstruccionistas:
Toman el mismo evangelio pero reconstruyen la forma de la iglesia. Un ejemplo son los que promueven las ‘house churches’ (iglesias hogareñas).

c) Revisionistas:
Estos cuestionan y revisan no solo la iglesia, pero también lo que la mayoría de evangélicos entienden del evangelio. Estos serían los “conversacionalistas” de Darrin Patrick, el extremo de lo emergente.

La diferencia entre “emergent” y “emerging”
Mark Driscoll, divide al movimiento en dos: “Emerging” y “Emergent”. Con esto quiere distinguir a aquellos que desean buscar diferentes formas de atraer a más personas a la iglesia sin cambiar la teología (emerging) y aquellos que para atraer a más personas han iniciado a cambiar el evangelio para satisfacer al resto de las culturas, adoptando creencias de estas otras religiones (emergent) (Criswell Theological Review–Spring 2006; 87-93).
Mark Driscoll, catalogado dentro del movimiento emergente (‘emerging’) se refirió en su libro “Confessions of a Reformission Rev...”, diciendo:
“Yo fui parte de lo que ahora se conoce como el movimiento de la iglesia emergente en sus primeros días…Me tuve que distanciar, sin embargo, de una de sus ramas debido a diferencias teológicas. Desde el final de los 1990’s, esta rama se ha conocido como ‘Emergent’. La iglesia emergente es la última versión del liberalismo. La única diferencia es que el viejo liberalismo se acomodaba a la modernidad y el nuevo liberalismo se acomoda a la postmodernidad.”

Veamos lo que encontramos en la Wikipedia referente a lo “emergente” (”emergent”):
“Los "cristianos emergentes" deconstruyen y reconstruyen creencias cristianas, ciertas normas culturales y métodos. Esa contextualización puede apreciarse en la manera como este movimiento maneja la epistemología (*) post-fundacional y el abordaje pluralista del postmodernismo en cuanto a la religión y la espiritualidad”
(*) “Parte de la filosofía que trata de los fundamentos y los métodos del conocimiento científico”
En otras palabras, y como se dice en cristiano paladino, “hacen de su capa un sayo”. Hacen lo que quieren acomodando esto o aquello según sus intereses, según la clara y maquiavélica premisa: “El fin justifica los medios”.

2. Filosofía emergente

“Amados, por la gran solicitud que tenía de escribiros acerca de nuestra común salvación, me ha sido necesario escribiros exhortándoos que contendáis ardientemente por la fe que ha sido una vez dada a los santos”  (Judas 3, 4)
La visión del mundo dentro de este movimiento es definitivamente postmodernista. Dentro del postmodernismo la verdad es tomada siempre bajo sospecha.
La preocupación de la iglesia emergente es presentar un cristianismo que la cultura postmoderna pueda entender. Pero debido a que el postmodernismo rechaza el concepto de la verdad absoluta, y a que el cristianismo dice ser la proclamación de la absoluta verdad, el enfrentamiento entre ambos no se hace esperar, y es inevitable.
Desde un principio, sus postulantes han buscado vivir su fe en la sociedad posmoderna independientemente de lo que denominan “tradiciones religiosas cristianas”. La iglesia emergente pretende alcanzar a esta generación postmoderna, pero más bien ha ocurrido justo lo contrario.
Es la iglesia que pretende emerger o surgir del entendimiento tradicional de iglesia hacia una expresión postmodernista. Sus adherentes lo ven como “una iglesia postmoderna para una cultura postmoderna”.
Por ello algunos otros títulos asociados a lo Emergente son: post-evangélico; post-conservador; post-fundamentalista; post-fundacionalista; post-protestante, y jóvenes evangélicos.
Vemos aquí demostrada una tremenda insatisfacción por parte de los proponentes de lo emergente y sus seguidores, no sólo hacia las formas dentro de lo evangélico, sino también en cuanto a los contenidos, y ahí más bien radica el problema.
La “des-construcción” Emergente
Los Emergentes tienen un modismo particular llamado “Des-construir” (deconstruct), que significaría algo así como “desmontar”. Sería lo que un aprendiz de mecánico haría si le presentaran un motor de un vehículo. Lo desmontaría pieza por pieza para saber que es qué.
Los Emergentes hacen justo esto, pero no sólo con el “marco” (las formas tradicionalistas evangélicas), lo cual no sería problema, sino con el fondo; con las declaraciones escriturales. Ahí si tenemos un problema, porque parten de un posicionamiento de no fe.
Además, dado que de partida, por su posición postmoderna, contraria a lo que ellos llaman “modernismo”, no aceptan absolutos (por tanto, no aceptan declaraciones de fe), por lo tanto, en sus “conversaciones” y “diálogos”, jamás pueden llegar a ninguna conclusión, excepto esta: “no hay conclusión”
Ellos dicen que la Biblia dice que examinemos todo y retengamos lo bueno (1 Ts. 5: 21), pero el sentido de las palabras del apóstol Pablo es en relación a las cosas que oímos, que vemos, etc. no en cuanto a la inerrante Palabra de Dios, la cual jamás miente:
“Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia” (2 Ti. 3: 16)
Lo Emergente es absolutamente incompatible con la fe cristiana, ya que esta parte de absolutos, y lo emergente los niega por principio.

En busca del misticismo perdido 
En la Edad Media la gente estaba volcada en el misticismo, y además, todos creían que  Dios era el autor de todas las cosas. No obstante, para el modernismo, el hombre era el autor de todas las cosas. A su vez, en el postmodernismo, se habría creado un misticismo iluminado, un sincretismo o mezcla de ambos conceptos.
Lo Emergente parte de un posicionamiento histórico-filosófico que lo caracterice: el misticismo.
Vemos que las Escrituras para los emergentes son apreciadas por su misterio y no por su verdad. Es el misticismo lo que les atrae, la fantasía, lo ilusorio, y el misterio, no la verdad de Dios. No es más que una forma de escapismo.
En ese misticismo recurrente hacia el catolicismo medieval y monástico, encienden velas, levantan íconos, imágenes. Crean una atmósfera con diferentes sonidos e impregnada de diferentes aromas, etc. Toda esa apariencia puede cautivar a aquellos que sólo buscan nuevas sensaciones y emociones.
“Estos son los que causan divisiones; los sensuales, que no tienen al Espíritu” (Judas 19)
El misticismo es parte clave del “cristianismo emergente", debido al rechazo de la verdad objetiva, la teología sistemática, la hermenéutica, y en última instancia, el rechazo de la creencia de que ha de ser válido el lenguaje concreto de Dios acerca de Dios.
Con un concepto incierto de Jesús, conocimiento incierto en cuanto a todo, una salvación incierta, y una esperanza incierta basada en la idea tenue de que el reino de Dios está de alguna manera “emergiendo” en el proceso de la historia mundial, “lo emergente” ofrece la comodidad de las experiencias místicas, que no suponen ninguna responsabilidad espiritual, sino sólo la búsqueda de la felicidad personalista y ególatra.
El postmodernismo – a diferencia del modernismo - asegura que nadie puede estar realmente seguro de nada. Esta asunción aparentemente cargada de humildad pero carente de sentido divino, es la base filosófica de lo emergente, y lamentablemente este mismo contraprincipio se aplica a su teología: lo que importa no es lo que el autor dijo, sino lo que el lector o el espectador experimenta. 
Así, todo queda en aras de la subjetividad.
Para ser consecuente con la filosofía postmodernista, los emergentes deben desechar los dogmas verdaderos, es decir, las doctrinas. Deben purgar la iglesia de un evangelio exclusivo, una Biblia “autoritativa” y, entre otras cosas, de las doctrinas molestas como el infierno, el pecado original, etc. Esto es lo que está sucediendo en este momento. ¿Qué colocan en lugar de esto? De acuerdo al pensamiento postmodernista: misterio y preguntas. Debido a que las Escrituras han sido de-construidas, todo lo que queda es el relativismo. (http://sujetosalaroca.org/)
En ese sentido Doug Pagitt, recientemente en una entrevista con Todd Friel de Way of The Master Radio, negó que el infierno fuera un lugar, y que fuera el propósito de Dios enviar a los pecadores ahí.

3. Su tremenda insatisfacción hacia lo tradicional

Brian McLaren escribe así en su famoso libro “Generous Orthodoxy” pp. 255, 256, 257:
“El cristianismo occidental  (desde los últimos siglos) ha dicho relativamente poco acerca de la mente y de las prácticas de meditación, de lo que el budismo Zen ha dicho mucho. Hablar de cosas diferentes no es contradecirse unos a otros, es, más bien, tener mucho que ofrecer entre sí, de vez en cuando por lo menos… se nos ofrece una síntesis de las religiones del mundo para el diálogo”
Cuando uno está insatisfecho con su fe cristiana – normalmente, porque esa fe es inexistente para él – siempre va a la zaga buscando que encontrar para llevarse a su boca espiritual.
¿Qué tendrá el budismo que ofrecer de bueno, sabiendo que es una filosofía diabólica? ¿Cómo es posible que un líder cristiano (así se presenta él) pueda decir eso que dice, y por escrito?
El yoga, ¿no es malo?
En entrevista para la televisión Doug Pagitt fue preguntado acerca del yoga y si un cristianos debería practicarlo, el claramente dijo que no veía ningún problema en la práctica del yoga.
Es más citó el pasaje de la Escritura de Filipenses 4: 8 (todo lo que verdadero, todo lo honesto, justo, puro…en esto pensad) para justificar su tropelía.
El yoga  es una de las seis doctrinas tradicionales del hinduismo. La palabra se asocia con prácticas de meditación en el hinduismo, el budismo y el jainismo. Según sus practicantes, el yoga otorga como resultado la unión o integración del alma individual con los dioses, o bien el desarrollo de la conciencia espiritual.
El yoga es una práctica que viene del hinduismo, y tiene mucho que ver con asimilación de espíritus inmundos. ¡Nada que ver con el cristianismo!
Pagitt o es un ignorante, ¿o qué es?

De la queja a la caja…de Pandora 
El movimiento emergente surge de la queja contra el que llamarían el establishment evangélico. Poco bueno sale de lo malo, aunque siempre hay que estar abiertos a recibir críticas, porque en algunos casos, nos ayudará a enmendarnos.
Dicho esto, prosigo. Aparentemente, la queja de los proponentes de lo Emergente hacia los posicionamientos conservacionistas podría ser hasta cierto punto comprensible. Escribe así el Ps. Steven W. Cornell en su artículo “The Emergent Church- A new wave of evangelical identity”:
“Algunos de los líderes más influyentes en lo Emergente han surgido de los enfoques conservadores y fundamentalistas del cristianismo. Se desprende de sus escritos que estos líderes se sienten traicionados por sus enseñadores. Rechazan la simplista, parcial y enjuiciadora manera como les enseñaron a mirar a las gentes en el mundo - muchas de las cuales parecen más agradables, humildes y amables  que la gente de sus iglesias fundamentalistas”
Sin embargo, el Señor Jesús nos advirtió que juzgásemos con juicio justo:
“No juzguéis según las apariencias, sino juzgad con justo juicio” (Juan 7: 24)
Es fácil acomodarse a la carne justificándose con el pecado de terceros, más aún siendo estos últimos, cristianos profesantes.
Lo que se entreve del movimiento Emergente, es una gran falta de discernimiento, y como dije antes, un confundir el fondo con la forma.
Es cierto que hay cristianos profesantes que andan en insinceridad, parcialidad, deshonestidad, etc. pero ese no es motivo para rechazar el cristianismo tal y como la Biblia lo enseña, e ir a formas y sobretodo – fondos - que contradicen en mayor o menor grado ese cristianismo auténtico.
Pero como dice también el Ps. Steven W. Cornell en su aludido artículo:
“Cuando los creyentes no están firmemente basados en la verdad bíblica, oscilan como niños susceptibles de cambiar constantemente de opinión acerca de lo que creen porque alguien les ha dicho algo diferente”
Esto concuerda con las palabras del autor a los Hebreos que les insta a dejar las simplezas y a alimentarse en serio con la Palabra de Dios:
“Porque debiendo ser ya maestros, después de tanto tiempo, tenéis necesidad de que se os vuelva a enseñar cuáles son los primeros rudimentos de las palabras de Dios; y habéis llegado a ser tales que tenéis necesidad de leche, y no de alimento sólido. 13 Y todo aquel que participa de la leche es inexperto en la palabra de justicia, porque es niño” (Hebreos 5: 12, 13)
Seguiremos en una próxima entrega.
Dios les bendiga.

© Miguel Rosell Carrillo, pastor de Centro Rey, Madrid, España
Mayo 2010

PARTE 3

1. La oferta Emergente

“…no sirviendo al ojo, como los que quieren agradar a los hombres, sino con corazón sincero, temiendo a Dios”(Colosenses 3: 22)
Los proponentes de lo Emergente dicen ofrecer lo que creen es un cristianismo más auténtico. Creen que la Iglesia debe ser una comunidad agradable y auténtica donde aflore la creatividad y la espontaneidad en un sentido de “autenticidad”. Un lugar donde la gente con opiniones diferentes se trata con el mayor respeto y tolerancia. Un lugar donde se acepte a todo el mundo, no se condene a nadie, se vea lo bueno (y no lo malo) de la gente.
En este sentido, el engaño subyacente en lo Emergente queda plasmado en la siguiente declaración, la del líder Doug Pagitt, de la iglesia emergente “Salomon´s Porch”
“Para nosotros es más importante sentir que estamos representando una bella expresión de nuestra vida con Dios que el tener razón en todo”
El problema es que esto es absolutamente arbitrario. Sentir una “bella expresión de nuestra vida con Dios” es algo absolutamente subjetivo y condicionado a la interpretación del individuo, mientras que “tener razón en todo” nunca debería serlo desde una perspectiva subjetiva, sino objetiva según Dios, y siendo así, sí es importante tener razón, o más bien, estar en la razón o la verdad.
En directa relación a lo que explico, responde el Profesor Scot McKnight de la North Park University:
“Muchas de esas voces emergentes, no tienen conceptos teológicos claros, y esto es atrayente y atractivo para una generación acostumbrada a la temática del diálogo, la opinión y la conversación, y no a hacer juicios constatables  en cuanto a las personas”
Es esta una generación que ha confundido el respeto con la tolerancia. Podemos respetar, pero no siempre tolerar. Hay veces en que hemos de decir: ¡No!

Es esta generación de la postmodernidad, acostumbrada a pensar que todo es relativo y según el cristal como se mire. Una generación sin absolutos, y demasiado pendiente de sí misma, demasiado acostumbrada al “vive y deja vivir”.
Estos líderes emergentes abiertamente cuestionan la inerrancia de la Biblia, y como deberíamos entender la Escritura. Incluso hacen preguntas acerca de la verdad de la vida eterna, cuestionando mucho de todo ello.
Huída de la razón y renuncia del dogma divino 
Como ya apuntaba Doug Pagitt, los Emergentes sostienen que su tipo de iglesia refleja la cultura actual, la cual está enmarcada en lo que se denomina postmodernismo.
Como ya apuntamos, si el modernismo estuvo definido por una confianza ciega en la razón como medio para encontrar la verdad, el postmodernismo perdió por completo dicha confianza, resignándose a simplemente reconocer que no podemos acceder a la verdad, y ni siquiera es importante hacerlo, lo cual constituye una huída a ninguna parte.
La iglesia emergente parte de una premisa absolutamente errónea y contraria al Evangelio: no hay seguridad en nada, ni siquiera en la revelación de Dios, la Biblia. Siendo así, ellos mismos se auto marginan del cristianismo.
Lo emergente llevado al extremo, es una fe sin fe.
Con que "cada uno tiene su verdad", y no tenemos cómo demostrar que uno u otro está en lo correcto, entonces no nos vamos a preocupar por la Verdad. Esta es una forma de agnosticismo que está conduciendo a la perdición a muchos.
Para ellos, lo importante ahora no es predicar la Verdad - lo que resulta en un Absoluto demasiado pesado, y además se contempla como arcaico y pasado de moda - sino conversar, dialogar, ya que así se podría construir una verdad al uso con las aportaciones cada uno posee o mantiene, y así llegar a obtener una conclusión aceptable para todos.
Ese terror a los absolutos, de hecho no es sino consecuencia del amor al pecado y a la carne del individuo.

Lo pluralista en lo emergente 
Lo absoluto de Dios es cuestionado en aras de conseguir la armonía y el bienestar de todos los profesantes. Es un querer contentar a todos, a como de lugar.
En ese sentido Brian McLaren, uno de los más visibles líderes del Movimiento Emergente hace la siguiente declaración:
“Cuando lo hacemos sonar como que tenemos los tornillos bien apretados y todos los clavos martillados, y tenemos todo entendido, en ese momento, pienso que hemos dejado de ser fieles (énfasis mío)
¡Tremenda declaración! Viene a decir que nosotros, los creyentes no podemos llegar a estar seguros de nada, y que cuando decimos que sí lo estamos (conforme a la verdad revelada en la Palabra de Dios, entonces “hemos dejado de ser fieles”… ¿Fieles a qué?
Este mismo planteamiento lo enseña la Iglesia Católica y Romana cuando asegura que nadie puede estar seguro de su salvación, y que si así lo cree, entonces está pecando de presunción.
McLaren olvida que el verdadero Evangelio debe ser anunciado para ser creído, no es para ser simplemente tenido como una experiencia personalista y subjetiva.
Hay tantos dentro del Movimiento Emergente tan influenciados por las ideas y conceptos pluralistas y postmodernistas, que les suena sumamente intolerante y hasta ofensivo cualquier mención a la verdad objetiva.
Aquí vemos una clara contradicción con el cristianismo verdadero.
Para ellos la simple mención de las mismas palabras de Cristo, cuando Él dijo: “Yo soy el camino, la verdad y la vida, y nadie viene al Padre sino por Mí” (Jn. 14: 6) resultaría ser inaceptable.
Los mismos líderes emergentes dicen que debido a que su gama de creencias es tan diversa, es imposible hacer juicios tan radicales.
Recibiendo al no acepto
En el nombre del amor, se acepta a todo el mundo como igual en sus reuniones, pero esa no es la enseñanza bíblica:
“Cualquiera que se extravía, y no persevera en la doctrina de Cristo, no tiene a Dios; el que persevera en la doctrina de Cristo, ése sí tiene al Padre y al Hijo.10 Si alguno viene a vosotros, y no trae esta doctrina, no lo recibáis en casa, ni le digáis: ¡Bienvenido! 11 Porque el que le dice: ¡Bienvenido! participa en sus malas obras” (2 Juan 9-11)
Cristo no aceptaba “a todo el mundo”: “Y dijo: Por eso os he dicho que ninguno puede venir a mí, si no le fuere dado del Padre” (Juan 6: 65)
El problema de base es el tratar de ganar al mundo a través de parecerse a él.
La Iglesia de Jesucristo no es un club social. Ni siquiera es un club religioso. No se trata de agradar al individuo, sino de agradar a Dios.
No siempre es agradable y placentero lo que ocurre en el contexto de la iglesia. A veces (y muchas) hay que corregir, reprender disciplinar y actos así que son implícitos dentro de la espiritualidad de la congregación.
No siempre podemos los pastores dar la razón en todo a todos. No siempre podemos ser tolerantes con todas las opiniones y razonamientos.
La Palabra de Dios no puede ser más explícita:
“A algunos que dudan, convencedlos. 23 A otros salvad, arrebatándolos del fuego; y de otros tened misericordia con temor, aborreciendo aun la ropa contaminada por su carne” (Judas 22, 23)


2. El apóstata Brian McLaren

Brian McLaren es uno de los principales exponentes del Movimiento Emergente, y por eso requiere de una exposición particular en este estudio.
Brian McLaren es uno de los líderes más visibles de este movimiento. En lugar de regresar al entendimiento de la Reforma en cuanto a las Escrituras, él ha vuelto al misticismo católico y a encumbrar la praxis antes que la teología. Él ofrece a los jóvenes de hoy en día una experiencia indefinida, mística y "la esperanza" que de alguna manera el reino de Dios está surgiendo en los procesos de la historia para traer una salvación planetaria, que no es la salvación individual.
McLaren fue catalogado por la revista Time como uno de los 25 evangélicos más influyentes de América en la edición de Febrero del 2005, aunque él no es evangélico.
El es sin lugar a dudas, ecléctico por sistema. Dice identificarse con protestantes, liberales, conservadores, carismáticos, fundamentalistas, calvinistas, anglicanos, metodistas y católicos.
Según dice, él ha conocido siete Jesús diferentes, dependiendo de la denominación y pregunta, “¿Porqué no celebrarlos todos?”
Brian McLaren navega en el mar de la apostasía.

Parece que McLaren ha diseñado su propio cristianismo, particularmente escogiendo las cosas que le gustan y dejando las que no. Veamos lo que dice en su libro “A Generous Orthodoxy”,
“El aporte que encontrarán aquí busca encontrar la manera de abrazar lo bueno de muchas tradiciones y ramas históricas de la fe cristiana, e integrarlas, en un nuevo, generoso, abordaje emergente que es mayor que la suma de sus partes.”
Es un cristianismo hecho a medida, como el traje que usted se va a comprar.
Pero para el apóstol Pablo, la cosa era muy diferente. El le dijo a Timoteo:
“Lo que has oído de mí ante muchos testigos, esto encarga a hombres fieles que sean idóneos para enseñar también a otros.” (2 Timoteo 2: 2)
El mensaje no es ecléctico, ni interesado, ni pretende agradar a todos. Es firme, claro, contundente y veraz. Es el mensaje de Dios, es Su Palabra.
No obstante McLaren navega en su mar de desencuentros, irrealidad y fantasía, pretendiendo hacer compatible lo incompatible. El escribe lo siguiente en su libro “A Generous Orthodoxy”:
“¿Por qué soy Misional + evangélico + post/protestante + liberal/conservador + místico/poético + bíblico + carismático/contemplativo + fundamentalista/Calvinista + Anabaptista/Anglicano + Metodista + católico + verde + encarnativo + deprimido/esperanzado + emergente + Cristiano a medias”
  En ese, su libro, McLaren cuenta la historia de cómo ha llegado a crear una versión única del cristianismo al espigar partes que le gusta de muchas fuentes. El resultado es lo que él llama un “cristianismo emergente".
Así pues, el cristianismo de McLaren es la suma de todo lo que a él le parece debe ser el cristianismo, siempre huyendo del “modernista” concepto del Absoluto divino.
La verdad que expone (dentro del entendimiento postmodernista) es que no se puede llegar a saber la verdad. La suya es una religión de la no esperanza. Escribe al respeto Bob DeWaay:
“En lugar de ofrecer esperanza cristiana a una generación de jóvenes que han rechazado todas las formas del cristianismo, McLaren socava la posibilidad de que cualquier persona tenga una esperanza válida cristiana basada en conocer la verdad del evangelio. Digo esto porque quita la esperanza de llegar a saber nada”

Salvación planetaria, no individual
El problema con el pensamiento emergente es que ha enfocado en el ahora, y ha dejado de lado lo que la Biblia ha hecho un tema central: Nuestra futura redención.
Hombres como Steve Chalke y Brian McLaren catalogan la salvación individual  como ‘abuso infantil cósmico’ y no comprenden como “la teoría de la expiación requiere sufrimiento por parte de un substituto inocente para traer el perdón de pecados’ (McLaren–The Story, pag. 105-6).
El concepto salvífico de McLaren, no es el escritural, en cuanto al individuo, es más bien corporativo y planetario. Él aboga por una salvación aquí y ahora de toda la creación y de todos los individuos, aun y siendo pecadores (sin arrepentirse). El enseña acerca de una salvación por parte de Dios, de la destrucción en lo natural que el mismo ser humano podría producir. Un planteamiento ausente de la Escritura.
El escribe así en su libro “A Generous Orthodoxy”. pp. 95, 96
“Yo soy cristiano porque creo que, en todos estos aspectos, Jesús es la salvación del mundo. Por "mundo" quiero decir el planeta Tierra y toda vida en él, porque si nos dejara a nosotros, seres sin juzgar, sin perdonar, y sin enseñar, sin duda destruiríamos este planeta y sus habitantes. Y por "el mundo" específicamente quiero decir: la historia humana, porque, repito, era y está en peligro, grave peligro, el peligro en última instancia, un peligro auto impuesto, y yo no creo que nadie más pueda rescatarlo. "
McLaren medio burlándose de la salvación como la Biblia enseña, escribe:
"Pero me temo que para muchos cristianos, la "salvación personal "se ha convertido en otro producto de consumo personal (tales como ordenadores personales, un diario personal, el tiempo personal, etc) y el cristianismo se ha convertido en su programa de marketing”  (P. 99)
Así que para McLaren la misión es salvar al mundo en un sentido social y ambiental, no para rescatar a los pecadores perdidos de un mundo perdido y moribundo que Dios va a destruir en el juicio.
Escribe McLaren: "La idea de que el mensaje cristiano es una buena noticia universalmente, tanto para los cristianos como para los no cristianos, es para algunos, desconocida, extraña, y quizá herética. Para mí, se ha convertido en natural y obvio” (110)

Todos juntos en armonía (no importa lo que creas) 
“No os unáis en yugo desigual con los incrédulos; porque ¿qué compañerismo tiene la justicia con la injusticia? ¿Y qué comunión la luz con las tinieblas?  15 ¿Y qué concordia Cristo con Belial? ¿O qué parte el creyente con el incrédulo?” (2 Corintios 6: 14, 15)
Además McLaren aboga por una hermandad de todos, sin importar el credo. En la página web de Cedar Ridge, la iglesia que lidera Brian McLaren, en la sección Visión y Misión, podemos ver el siguiente extracto:
“Imagine una comunidad que se atreve a soñar con el cielo en la tierra, una comunidad donde todos son aceptados y respetados y queridos en su viaje, independientemente de su origen, creencias o lugar en la sociedad… Imagínese una comunidad de gente dedicada a seguir a Jesús juntos, aprender a vivir como él y ayudándose unos a otros a crecer en su relación con Dios, donde nos estamos transformando gradualmente para convertirse en mejores personas…”(http://www.crcc.org/content/page/our-vision)
Sólo puedo ver cierta falacia en ese argumento; ¿Cómo va poder existir una comunidad que siga a Jesús, sin importar lo que cada uno crea (su creencia)?
Pero eso no nos debe asombrar. McLaren dice lo siguiente, lo cual es absolutamente específico:
“Yo no creo que hacer discípulos quisiera decir necesariamente convertirlos al cristianismo. Es aconsejable en muchas circunstancias, no en todas, ayudar a la gente a ser seguidores de Jesús sin abandonar sus religiones budistas, hindúes o judías, y no entrar en la parodia del destino eterno de la gente que es fiel a otras religiones distintas a la nuestra, debemos superar eso”.
“Para poder ayudar a los budistas, musulmanes, cristianos y cualquier persona de otra religión, a experimentar la vida a lo máximo en la manera de Jesús, con mucho gusto me convertiría en uno de ellos, a cualquier grado necesario para abrazarlos, unirme a ellos, entrar en su mundo sin juzgarlos pero con el amor del Señor, el cual me alcanzó a mí también”. http://apostasiaencartagena.blogspot.com/2009_04_01_archive.html
En su libro “Generous Orthodoxy”, escribe lo siguiente:
“La fe cristiana que yo propongo, debería ser (en el nombre de Jesucristo) una amiga que da la bienvenida a las otras religiones del mundo, no una amenaza” Brian McLaren, A Generous Orthodoxy, (Youth Specialties: El Cajon, CA, 2004; published by Zondervan). Pp 254
Primeramente, la fe cristiana no es una amenaza, sino que es las Buenas Nuevas de salvación, y como único camino al Padre, Cristo no puede estrechar su mano a ninguna otra creencia al respecto.

3. Lo ecuménico en lo “emergente”

“Cualquiera que se extravía, y no persevera en la doctrina de Cristo, no tiene a Dios; el que persevera en la doctrina de Cristo, ése sí tiene al Padre y al Hijo.  10 Si alguno viene a vosotros, y no trae esta doctrina, no lo recibáis en casa, ni le digáis: ¡Bienvenido!  11 Porque el que le dice: ¡Bienvenido! participa en sus malas obras” (2 Juan 21-22)
Por definición el ecumenismo busca la unidad del cristianismo que trasciende y minimiza las diferencias doctrinales. Es la búsqueda de lo imposible: la unión del agua con el aceite. John Franke, uno de los pensadores del movimiento dice:
“La testificación bíblica de Jesucristo como la única salvación y esperanza para el mundo no demanda la postura restrictiva concerniente a la salvación de aquellos que nunca han escuchado el evangelio o a aquellos en otras tradiciones religiosas.”
En otras palabras, no importa si se cree o no en Jesucristo, mientras uno sea fiel a su creencia (este es mensaje jesuita, por cierto).
Ensalzando el ecumenismo, y en un tono desafiante, Brian McLaren escribe en su libro “Generous Orthodoxy”:
“Para añadir insulto al daño, casi todas las ortodoxias de la historia cristiana han mostrado desagrado para las demás religiones del mundo: Budismo, Hinduismo, Judaísmo, Ateísmo, etc. Una ortodoxia generosa de la clase explorada en este libro, mientras no busca el relativismo, busca ver miembros de otras religiones y no-religiones, no como enemigos sino como amados vecinos y cuando sea posible, compañeros de dialogo y hasta colaboradores.”
No obstante la Biblia dice algo muy diferente a eso:
“No os unáis en yugo desigual con los incrédulos; porque ¿qué compañerismo tiene la justicia con la injusticia? ¿Y qué comunión la luz con las tinieblas? 15 ¿Y qué concordia Cristo con Belial? ¿O qué parte el creyente con el incrédulo? 16 ¿Y qué acuerdo hay entre el templo de Dios y los ídolos?” (2 Corintios 6: 14-16)
Si en nuestras iglesias permitiéramos tener a personas de otras religiones, tratándolos como hermanos, estaríamos pecando. Si no les enseñáramos lo que dice la Biblia acerca del único camino para ser salvos (Juan 14:6; Hechos 4:12), pecaríamos. Lo que dice McLaren no es lo que Jesús nos enseñó, y mucho menos lo que nos ordenó (Mateo 28: 18-20). Lo que enseña McLaren no es amar al prójimo, si no más bien ¡condenarlos al fuego eterno!
El movimiento emergente se ha convertido en un defensor del inclusivismo, que dice que a pesar de que la salvación se basa en la obra de Cristo, otras personas pueden ser salvas sin creer en Cristo, dependiendo de su respuesta a la revelación particular que Dios les dio a cada uno. Con esta idea, un musulmán, un hindú, un gnóstico, pueden llegar a ser salvos si siguieron la luz que les fue revelada con respecto a Dios, sin haber creído por fe en Cristo. ¡Por demás murió Cristo!

4. La escatología en lo “emergente”

La escatología en lo “emergente” es absurda y desprovista de la verdad profética bíblica. Todo el concepto de las “cosas que han de ser después de estas” (Ap. 1: 19), sólo tiene que ver con el aquí y ahora. Lo “emergente” cree que el Reino es ahora (Kingdom Now), y que está “emergiendo” paulatinamente. Todo lo contrario a lo que enseña la Biblia que dice que el Reino vendrá de repente Daniel 2: 44, 45).
Geoff Maddock dice al respecto:
“Nuestro principal deseo es ver el reino de Dios en la tierra así como es en el cielo. Nosotros creemos que esto ocurre cuando el pueblo de Dios es renovado alrededor de las misiones divinas de amor y justicia en el mundo.”
En otras palabras, que son los cristianos los que debemos hacer que el mundo cambie al ser “renovados”.
El movimiento emergente enseña que el reino de Dios se desarrolla ahora en la tierra y que progresivamente se está pareciendo al cielo mientras los cristianos viven misionalmente en la tierra.
Según la visión dentro del movimiento, nuestra misión es hacer que el mundo actual progresivamente se parezca al cielo, es decir, hacer de la tierra un lugar mejor para toda la humanidad.
Para Brian McLaren la última meta de Cristo es traer el reino de Dios a la tierra. ¿Cómo es este reino de Dios aquí en la tierra? Rob Bell dice:
“La Salvación significa que todo el universo va a ser traído en armonía hacia Dios. Nosotros podemos unirnos a un movimiento tan grande como el universo. Las piedras, los árboles, los pájaros, los ecosistemas. El deseo de Dios es restaurarlo todo…Para Jesús la pregunta no es como entrar al cielo, sino cómo traer el cielo a la tierra? La meta no es escapar de este mundo, sino reconstruirlo para que Dios pueda venir a él.”
Muy idílico, pero falso. La Biblia enseña otra cosa:
“En los días de estos reyes el Dios del cielo levantará un reino que no será jamás destruido, ni será el reino dejado a otro pueblo; desmenuzará y consumirá a todos estos reinos, pero él permanecerá para siempre, 45 de la manera que viste que del monte fue cortada una piedra, no con mano, la cual desmenuzó el hierro, el bronce, el barro, la plata y el oro. El gran Dios ha mostrado al rey lo que ha de acontecer en lo por venir; y el sueño es verdadero, y fiel su interpretación”(Daniel 2: 44, 45)
1) Es el mismo Dios – y no los creyentes - quien establecerá el Reino en la tierra.
2) Lo hará en un momento dado, y de repente.
3) Lo hará con violencia.
Además, Cristo no murió por el universo y los ecosistemas, sino sólo por los hombres. Cristo pagó el precio de la justicia, y así cesó la ira de Dios que estaba puesta sobre ellos. Jamás en la Biblia se nos enseña que Cristo murió por los animales, o por los árboles. 

5. Conclusión

El Movimiento Emergente surge en reacción – ellos llaman - a la iglesia modernista, basada en absolutos y dogmas de fe, así como a las formas estáticas y comportamientos tradicionalistas.
Plantea una solución Postmodernista para esta sociedad postmoderna, sobre todo hacia la juventud.
El Movimiento Emergente surge en reacción también contra el tipo de iglesias que les gusta la opulencia, los inmensos edificios, derroche de dinero, etc.
En algún caso, su queja ha tenido algún sentido, pero no su respuesta.
Su aportación sobre todo en el caso de los conversacionales o revisionistas, es nefasta para el Evangelio, trayendo desorden, confusión, apostasía, engaño, distorsión, y levantando la burla de los impíos hacia el Evangelio.
Claman por ser un movimiento misional, pero fallan en lo doctrinal, y ese es un error. Su forma de escapar las críticas es diciendo: “la verdad es relativa“, pero lo absurdo es que ellos claman que esa afirmación es una verdad, y por lo tanto resultan absurdo este tipo de pensamiento.
Lo que los emergentes han hecho es desechar el alcance de la verdad, y relegar a un segundo plano la autoridad de la Biblia, además de desechar las doctrinas que la iglesia ha adoptado desde siempre.
Elementos encubiertos
“Porque ya está en acción el misterio de la iniquidad; sólo que hay quien al presente lo detiene, hasta que él a su vez sea quitado de en medio. 8 Y entonces se manifestará aquel inicuo, a quien el Señor matará con el espíritu de su boca, y destruirá con el resplandor de su venida” (2 Ts. 2: 7, 8)
En mi opinión varios de estos personajes que comandan lo emergente son agentes encubiertos infiltrados en lo evangélico, para destruir la iglesia.
¿Desaparecerá este tipo de mal entender la iglesia? Posiblemente, pero no perdamos la perspectiva de los tiempos.
Estamos en el final del tiempo de los gentiles, y sólo con la venida del Señor desaparecerá todo vestigio del mal.
Dios les bendiga.

© Miguel Rosell Carrillo, pastor de Centro Rey, Madrid, España
Mayo-Junio 2010